Nuestra historia

Somos internacionales e innovadores, y lo hemos sido siempre

Garrigues

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Garrigues es el resultado de más de 80 años de historia al frente del sector legal. En cada etapa, evolucionamos y nos anticipamos a los cambios que estaban por llegar manteniendo siempre la esencia de la profesión y de la firma: estar al lado de cada cliente, ser capaces de identificar e interpretar sus necesidades, y ofrecer el mejor servicio.

En continua evolución

 

El papel de Garrigues ha sido clave en la modernización de la abogacía española. En la segunda mitad del siglo XX, importamos el modelo de gestión de las firmas anglosajones y nos convertimos en el despacho de referencia de las primeras compañías extranjeras que llegaban a España.

1941-1969

J&A Garrigues nace en 1941, fruto de la unión de los despachos que, separadamente, dirigían los hermanos Joaquín y Antonio Garrigues Díaz-Cañabate. En 1954 se incorpora al despacho familiar Antonio Garrigues Walker (hijo de Antonio Garrigues Díaz-Cañabate), quien ocho años después asume la presidencia de la firma tras la marcha de su padre como embajador de España en EE.UU. Comienza entonces la institucionalización del despacho de abogados y el giro hacia un modelo anglosajón con una estructura de partnership, donde la firma es propiedad colectiva de los profesionales en función de sus méritos y antigüedad.

1970-1969

Los años setenta marcan para Garrigues el inicio de su prestigio entre las compañías extranjeras que ponían su punto de mira en España, aprovechando la apertura que el nuevo sistema democrático iba a propiciar. El liderazgo del despacho en el campo de la inversión extranjera llegó a tal punto que Henry Ford creyó durante algún tiempo que en realidad Garrigues debía tratarse de una clase de impuesto español, ya que veía el concepto Garrigues fee en casi todas las contabilidades de las compañías norteamericanas que aterrizaban en nuestro país. Junto con la compañía Ford, otros clientes destacables fueron IBM, Philip Morris, Hewlett-Packard y Avon. Sin duda, parte fundamental de este éxito fue la oficina que Garrigues tenía en Nueva York desde 1973; fuimos el primer despacho europeo en establecernos en la Gran Manzana.

 

En 1997 se produce la unión de Garrigues y Andersen ALT, una fusión que propició nuestro crecimiento y aumentó las sinergias internas, así como el perfeccionamiento del sistema de dirección, la formación técnica de nuestros profesionales y la internacionalización del despacho.

1997

Con un crecimiento constante en cuanto a número de profesionales y volumen de negocio, se llega a 1997, un año decisivo en nuestra historia y en cuyo origen se encuentra el comienzo de lo que hoy es Garrigues: la fusión con Arthur Andersen Asesores Legales y Tributarios (ALT), la rama de legal y tributaria de Andersen.

La unión se lleva a cabo bajo el paraguas de cuatro conceptos: la sinergia en las áreas de práctica, el perfeccionamiento del sistema de dirección, la formación técnica de los profesionales y la internacionalización de las actividades. Fue también la unión de dos culturas empresariales diferentes que supieron complementarse de manera ejemplar para sacar lo mejor de cada una: Garrigues era líder en servicios de asesoría laboral, asesoramiento mercantil y civil; y Andersen en el ámbito de la consultoría, auditoría y asesoramiento fiscal.

 

Garrigues estrena siglo recuperando su independencia. Comienza una nueva etapa que consolida nuestro liderazgo en la abogacía mundial. Una firma multidisciplinar, más fuerte, sólida e internacional.

2000-2010

El siglo XXI trae la caída de la multinacional Enron, que provocará la desaparición de Arthur Andersen. En el año 2002, los socios de Garrigues deciden iniciar una nueva etapa desligándose totalmente de Andersen y recuperando su anterior denominación: J&A Garrigues. A pesar de las dificultades de aquel momento, nadie en Garrigues discute el balance positivo de la fusión. Las cifras así lo indican: en los cinco años transcurridos desde aquella unión, Garrigues había incrementado su facturación en un 130% y duplicado su número de profesionales hasta superar los mil.

Para mantener este liderazgo, el despacho se emplea a fondo y emprende el camino para contar con una red internacional propia. En la primera década del 2000, comienza nuestra expansión en países en crecimiento como China, Marruecos y Polonia, y la apertura de otras sedes en mercados más consolidados como Portugal y Reino Unido.

 

Ha sido durante la presidencia de Fernando Vives cuando el despacho ha acometido el grueso de su expansión internacional, ha afrontado su transformación digital, y se ha situado a la vanguardia en sostenibilidad y ESG.

2010-2019

El 1 de octubre de 2014 Fernando Vives, uno de los mercantilistas más reconocidos de la abogacía europea, fue nombrado presidente ejecutivo de Garrigues (desde 2010, ocupaba el cargo de socio director). Antonio Garrigues era designado presidente de honor de la firma, además de seguir al frente de la Fundación Garrigues. Desde entonces, Vives ha sido reelegido como presidente por los socios en dos ocasiones; Ia última, en 2022.

La presidencia de Fernando Vives marcó una nueva etapa en la que Garrigues se ha convertido en un estudio de referencia en América Latina, con un modelo de gestión a través de oficinas propias y un sólido equipo de profesionales que comparte la misma cultura empresarial y los mismos valores. Las aperturas de Colombia, Perú, México y Chile otorgan a Garrigues una de las presencias directas más relevantes de Latinoamérica con capacidad para operar local, regional e internacionalmente desde todos los ángulos del derecho de los negocios.

En este periodo, jalonado por dos grandes crisis (la financiera de 2008 y la del COVID-19), se inicia también la transformación digital del despacho y se acentúa su compromiso ESG.

2020…

La llegada de la pandemia de COVID-19 puso a prueba una de las máximas de nuestro presidente: “El principal reto al que nos enfrentamos es conseguir que el despacho esté preparado para afrontar todos los futuros posibles en un escenario cada vez más incierto”. Y mostró la capacidad de Garrigues para hacer frente a las incertidumbres. La confianza de nuestros clientes, el talento de nuestro equipo, la diversificación por servicios y países, y la solidez financiera son los factores que nos animan a afrontar el futuro con confianza.