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La citada norma tiene por objeto mejorar la regulación administrativa y mercantil que rige las actividades económicas y, por tanto, corregir la fragmentación del mercado español por la excesiva proliferación y disparidad de normas de distintos niveles competenciales, garantizando la efectiva libertad de circulación de bienes, servicios e inversiones en el territorio español.

Según se ha adelantado, se pretende que la Ley de Garantía de Unidad de Mercado establezca las siguientes medidas:

• Implantación de una licencia comercial única. Los operadores comerciales únicamente necesitarán la licencia de una sola Comunidad Autónoma para operar en todo el territorio nacional.
• Creación del Consejo para la Unidad de Mercado, presidido por el Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas y que contará con la participación de los consejeros de las Comunidades Autónomas, como órgano de cooperación administrativa que vigilará del estricto cumplimiento de la Ley e informará de la situación regulatoria del mercado.
• Regulación de mecanismos de cooperación entre Administraciones Públicas. Se prevé regular y crear una única base de datos electrónica para todas las Administraciones Públicas con el objeto de realizar labores de control y supervisión.
• Establecimiento de un procedimiento ante la futura Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia para la impugnación de los actos administrativos o sanciones impuestas a los operadores que puedan vulnerar la unidad de mercado y, por tanto, obstaculicen la libre circulación de productos y servicios.

En definitiva, la Ley de Garantía de la Unidad de Mercado estará inspirada en el principio de licencia única, que ya funciona en el Mercado Único Europeo y, con la misma, se persigue que cualquier producto producido o servicio prestado al amparo de cualquier normativa autonómica pueda ser ofrecido libremente en cualquier punto del territorio nacional, sin necesidad de modificación o trámite adicional.